domingo, 26 de julio de 2009

I concurso de lectura LSM













El político argentino Nicolás de Avellaneda escribió: “Cuando oigo que un hombre tiene el hábito de la lectura, estoy predispuesto a pensar bien de él”; y es que la lectura nos ayuda a encontrarnos con nosotros mismos y también con los otros, creando una armonía universal que supera el espacio y el tiempo.


Fortaleza, ciudad de 3.000.000 habitantes, cuenta solamente con UNA biblioteca pública. Es cierto que todos los colegios del ayuntamiento y del gobierno del estado tienen bibliotecas, pero son muy precarias y anticuadas. Recientemente se inició el proyecto del autobús de la lectura que recorre los diferentes barrios, pero es igualmente insuficiente. Hay también poquísimas librerías y además los libros son un lujo que muchísima gente no puede permitirse.



El LSM ha realizado un taller de lectura en el escritorio de apoyo del barrio de Carlito Pamplona. Aprovechando el mes de julio en que los niños están de vacaciones conseguimos algunos libros infantiles para que los niños pudieran leer. El incentivo ha sido el “I Concurso de lectura LSM” que se llevó a cabo el día 25 de julio en el centro comunitario del barrio.

Los niños se prepararon durante todo el mes yendo y viendo a coger y a dejar uno y otro libro. Incansables, llegaban al escritorio, rebuscaban entre el montón de libros hasta encontrar uno de su agrado.

El día del concurso no faltaron las emociones y los nervios. Allá estaban educadores y colaboradores del LSM, la secretaria de la SAR que presidió el jurado, y algunos seminaristas agustinos recoletos. Todos ellos dieron solemnidad y prestancia a un concurso que los niños sintieron como si se tratara del Nobel de literatura. Cada niño leyó lo texto preferido, entre risas y aplausos de sus compañeros. Algunas niñas amenizaron el concurso con danzas modernas brasileñas. Tras el fallo del jurado y la entrega de premios llegó la merienda y las despedidas, no sin antes pedir que el siguiente concurso llegue pronto. Y va a llegar, porque ya tenemos un proyecto de dibujo de tarjetas de Navidad que irá destinado a la empresa de nuestro colaborador Pero Luis de Lodosa (ver blog del 22/04/2009).


Estas pequeñas iniciativas son las que marcan la diferencia en la vida de estos niños y adolescentes. Nuestros niños del “primer mundo europeo” no valoran las cosas porque tienen demasiado, pero nuestros niños brasileños, que necesitan absolutamente de todo, valoran estos pequeños detalles. Seguro que el diploma que recibieron junto con el premio serán un trofeo que servirá para animar sus pequeños sueños. Hijos de padres analfabetos, drogadictos, alcólicos, prostitutas, ladrones, e incluso asesinos… estos niños necesitan pesonas en quien mirarse y soñar: “yo quiero ser como fulano o mengano”



¡Ojalá que los libros se transformen en sus amigos inseparables y que cada página sea un motivo de superación y un sueño a realizar! Mientras tanto, el LSM continuará apoyandoles para que puedan crecer como hombres y mujeres de bien.

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