Han pasado tres años. ¡Se dice pronto! Tres años desde que decidimos sacar a Claudia ya a sus 4 hijos de la barraca de la favela donde vivían. Los niños estaban todo el día enfermos. El ambiente era insalubre y peligroso. Intentamos algunas otras medidas de protección para esos niños, pero estaban muy apegados a su madre y no querían separarse de ella. Nos pareció justo no separarlos, ya que Claudia es una buena madre: pobre, sencilla y bastante ignorante… pero una buena madre para sus hijos, que la adoran.
Así que recurrimos a la generosidad de una buena persona de España que durante tres años ha pagado el alquiler de una casa humilde en otro barrio de la ciudad. Allí Claudia y sus hijos han tenido una vida mejor. Han podido ir al colegio, ella ha recibido las ayudas sociales que le corresponden y ha podido hacer algunos trabajos domésticos para ganar un dinerillo….
asesorándola y acompañándola en la búsqueda de sus derechos. En este tiempo que ha permanecido en la casa alquilada hemos trabajado para que ella –al igual que otras de nuestras familias asistidas- consiguiera una casa de protección social del Ayuntamiento de Fortaleza. No ha sido fácil: han sido muchas llamadas de teléfono, muchos contactos, muchas idas y venidas a Habitafor (Secretaría de vivienda)… pero al final ha valido la pena.
Claudia, Ana, Germana… han conseguido ya su casa… otras familias siguen esperando y nosotros insistiendo.
En este mundo “solo se bautiza quien tiene padrino”, así que para conseguir estás casas ha habido que cultivar algunas “relaciones sociales” con las personas que gobiernan nuestra ciudad de Fortaleza. Fruto de estas buenas relaciones ha sido la invitación que el Ayuntamiento ha hecho al Lar Santa Mónica, en la persona de Fray Alberto, para bendecir el nuevo complejo habitacional en el que ahora viven Claudia y sus 5 hijos.
Seguimos insistiendo y confiando en la buena voluntad de los gestores de los proyectos de vivienda del Ayuntamiento, porque no es solo una cuestión de calidad de vida, se trata de la dignidad de familias enteras que viven hacinadas en barracas inmundas, donde la moral, la salud y la dignidad apenas existen.
Bienvenidas estas casas y las que, si Dios quiere, continuaremos consiguiendo para que estos niños y sus familias tengan un futuro mejor.
En las fotografías podéis ver la evolución de estos tres años:
Foto 2: Claudia dentre de su barraca en la fabela (año 2008)
Foto 3: Fachada de la barraca (año 2008)Foto 4: A la entrada del nuevo condominio (año 2009)
Foto 5: En su casa de alquiler (año 2009)
Foto 6: Toda la familia el día que salían para la nueva casa (año 2011)
Foto 7: Vista panorámica del condominio social donde ahora reside Claudia (año 2011).Foto 8: Claudia en su nueva casa con la más pequeña, nacida hace unos meses.
Foto 9: Frei Alberto en el momento de la bendición, junto a la alcaldesa de Fortaleza, y un surtido número de concejales y diputados.
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